CategorÃa: Dailies
Indestructible
El amigo José Medina Molero es un ingeniero venezolano quien también disfruta de escribir sobre béisbol. (Yo le he dicho que debería probar suerte con un MLBlog). Me envió una nota sobre Roger Clemens que voy a compartir con ustedes. Les digo, una de las cosas que siempre tendré que agradecer de mi trabajo con los Astros de Houston es el haber podido ver a una leyenda viviente como Clemens en vivo, y haberlo entrevistado, así fuera por pocos minutos.
Aquí está la nota de José:
¿Se imagina Ud. a un lanzador de grandes ligas con 44 años cumplidos, y con una efectividad de 2.58? Ese lanzador existe y, lleva por nombre Roger ,? El Cohete?, Clemens. Un fuera de serie de esos que, aparecen cada mucho en la constelación del béisbol.
La tarde del Domingo 20 de agosto, Clemens lanzó siete sólidos innings para conquistar su quinta victoria de la temporada, y vencer a Los Cerveceros de Milwaukee, a los que les permitió una sola carrera y 6 hits, juego en el que logró guillotinar a 7 bateadores , para alcanzar en su marca personal los 4564 ponches ( la segunda mejor marca de la historia de la gran carpa , solo superada por alguien sin duda extraterreno, el gran Notan Ryan, quien acumuló en su larga y brillante carrera 5714 bateadores pasados por las armas ).
Esta Victoria significó para Clemens, arribar a su triunfo 346 en 23 temporadas de labor. El registro, lo coloca en la Octava casilla de todas las épocas, escoltando a Leyendas del Béisbol como Warren Spahn, Walter Johnson y naturalmente el líder de líderes, Cy Young y sus inalcanzables para cualquier pitcher de este tiempo, 511 victorias. Clemens está a 15 victorias del séptimo puesto, ocupado por Charles Nichols , no obstante, dado lo tarde que entró Clemens ,esta temporada ( producto de las largas negociaciones que sostuvo con varios equipos ) y ( en menor grado a los descalabros infortunados que, tuvo en sus primeras apariciones de 2006 ) matemáticamente es imposible que alcance a Nichols ( a menos que decida lanzar en la temporada 2007, forzando una temporada 24, cuestión por demás innecesaria y riesgosa para su trayectoria), sin embargo, seguirá, en lo que resta de temporada, llevando lejos el registro de ponches que, persigue con tanta fiereza el no menos espectacular Randy Johnson.
Uno de los aspectos donde, puede visualizarse con mayor nitidez lo extraordinario que ha sido el accionar de Clemens , es en el porcentaje de victorias que posee: 0.663 vitalicio, registro que supera a los de grandes serpentineros de la Historia. A saber: Cy Young ( 0.618), Walter Johnson (0.599 ), Kid Nichols ( 0.634), Warren Spahn ( 0.597), Steve Carlton (0.574), Bob Gibson ( 0.591), Nolan Ryan ( 0.526), Tom Seaver (0.603), Sandy Koufax ( 0.655), , Jim Palmer ( 0.638), Randy Johnson ( 0.656) y Gregg Maddux (0.622), A la fecha, solo el porcentaje de Clemens se inclina ante uno mayor, el del fulgurante Pedro Martinez (lo que habla primores del Dominicano ), quien exhibe un sólido 0.698, producto de 206 triunfos y sólo 89 derrotas, un registro más que impresionante. Cuando se hace este comparativo, entre miembros del club de las 300 o más victorias alcanzadas, Clemens supera a todos, a excepción de Christy Mathewson ( 0.665) y Lefty Grove ( 0.680 ), quien lanzó entre 1925 y 1941. Como puede apreciarse para ganadores de 200 o más ( por el momento) el dominicano sería el rey y, Roger Clemens haría un singular y meritorio cuarto puesto.
¿ Qué le falta por ganar a alguien que, ha cosechado 7 premios ?Cy Young?, miembro del club de las 300 o más victorias y del de más de 4500 ponches, dos veces triple coronado, Series Mundiales, más valioso de Juego de estrellas y de la Liga, 46 blanqueadas, siete lideratos de efectividad, 4 lideratos de victorias, 3 lideratos de juegos completos ? Apartando el factor monetario, implícito, tal vez el Cohete quisiera despedirse con un gran victoria personal: un juego sin hits ni carreras ó aun mejor, un juego perfecto( joyas que hasta ahora han escapado de otros insignes pitchers, como Pedro martienz y Greg Maddux ), quizás alcanzar esa preciada gema , sea la mágica coronación para la carrera fulgurante que ha tenido ?El Cohete?.
Como fruto maduro, se cae la obligada interrogante: ¿Podrá el portentoso Clemens, para quien no pareciera existir la palabra ocaso, lograr esta joya, esa suprema muestra de dominio que, es un juego sin corredores en base , antes de que decida, finalmente, dejar los estadios?
Si siempre fuese asi…
Ayer vimos a los Astros jugar como siempre los quisimos ver. Seis carreras en el séptimo inning para apoyar a un Roy Oswalt que se lo merecía, estable luego de conceder dos carreras en el principio del encuentro.
La victoria de ayer ante Cincinnati 7-3 marcó igualmente un nuevo récord para la franquicia: Willy Taveras lleva una seguidilla de 26 encuentros conectando al menos un imparable; algo impresionante para un pelotero que se había dado a conocer gracias al toque de bola y la velocidad.
Phil Garner ha hecho cualquier cantidad de movimientos buscando ofensiva, el último de ellos les traer al inicialista J.R. House; y en lo que al bullpen concierne, Fernando Nieve permanecerá por un tiempo en la lista de incapacitados y Chris Sampson seguirá arriba.
Son 6 juegos los que separan a los Astros del comodín.
De pronóstico reservado
Me voy por unos días de viaje, ¿y qué me consigo? Los Astros se ponen en una posición muy comprometedora, tanto que un siempre optimista Phil Garner reconoce que depende de esta misma semana si Houston puede sobrevivir o no en la lucha por un puesto en la clasificación a la postemporada.
Gracias a una serie con resultados negativos en San Diego, una barrida por parte de los Cachorros de Chicago, debido a un tremendo pitcheo de Carlos Zambrano y el novato Ryan O’Malley y una serie dividida con los Cerveceros de Milwaukee, lo que se pintaba como una posible recuperación se convirtió en arar en el mar (hoy Roger Clemens, como de costumbre, dio una cátedra de pitcheo, y Houston ganó el encuentro 3-1).
Y así, las malas noticias se siguen apilando: Brandon Backe debe caer en la lista de incapacitados una vez más, Brad Lidge no termina de conseguirse consigo mismo, y por ello Garner ha decido usar un comité de cerradores.
Cuando escuché esa noticia, no pude sino tratar, por todos los medios, de no dar esta temporada por muerta. Pero qué difícil es.
La receta que llevó a los siderales a un campeonato de Liga en 2005 no fue ningún secreto: mantén a los bates contrarios a raya, que en el cierre Lidge era imbatible. Y por ello, el bateo poco productivo de los Astros no fue un obstáculo.
Pero este año, las cosas son distintas. Lidge va y viene, se le quita el rol de cerrador oficialmente en dos ocasiones ya. Y los bates no terminan de producir. Una receta para el desastre, sin lugar a dudas.
No queremos ser aves agoreras, pero hay que ver esta semana (a pesar de los supuestamente débiles rivales a los que se enfrentarán) como de pronóstico reservado. Cualquier resbalón, y debemos empezar a pensar en 2007.
Les confesaré que es una situación poco fácil de digerir para quien escribe, que a pesar de tratar de guardar una cierta objetividad no puede sino considerar este momento como un trago amargo. Amanecerá y veremos.
El show del Toro
Este equipo ha demostrado mejores signos de vida, aunque ahora llevan de 5-5 en sus últimos 10 encuentros. Pero definitivamente existe un antídoto que neutraliza cualquier síntoma de ánimo ofensivo que puedan tener: Carlos Zambrano.
El lanzador venezolano volvió a neutralizar a la ofensiva sideral, con ocho entradas sin permitir anotación y apenas 4 hits en 8 innings. Roy Oswalt también tuvo una muy buena aparición, con dos carreras en siete episodios.
No obstante, lo que mas preocupa es el pelotazo que recibió al nivel de su muñeca con una conexión de Ronny Cedeño. Su status es día a día.
Lo de Zambrano ya sabemos muy bien que no es cuento, y es uno de los mejores hoy en día; si sólo los Astros consiguieran la fórmula para romper su hechizo. Nada fácil por decir lo menos.
Espejismo o realidad
¿Es esta la vida real… o una mera fantasía? ¿Qué creen? ¿Cuáles son los verdaderos Astros: esta máquina de batear que hemos visto en los últimos días, producto del hecho que finalmente todas sus piezas están en perfectas condiciones, o los anémicos maderos presentes en toda la campaña?
Seis cuadrangulares disparados durante el encuentro, liderados por Aubrey Huff, quien hoy literalmente se destapó remolcando seis anotaciones, yéndose de 4-3; Craig Biggio, Jason Lane, Luke Scott también se unieron a la fiesta.. además de Roy Oswalt, quien disparó su primer vuelacercas en una inmemorable cantidad de turnos.
Fue un festín de batazos que se fue por una sola calle. 14 carreras y 15 hits para los Astros; 1 carrera y 4 hits para Pittsburgh; todas ellas responsabilidad de un apretado Oswalt que se mantuvo incólume por 7 capítulos.
Soberbio pitcheo, de principio a fin
Increíble. Brandon Backe es el titular del día (sí, ya sabemos que eran los Piratas pero eso no le resta mérito). 3 hits y una carrera en 7 episodios. Dan Wheeler y Brad Lidge se combinaron con 6 ponches. Eso se llama relevo dominante. Lo demás es cuento.
Un cuadrangular de Craig Biggio marcó el paso junto a ese soberbio pitcheo, y los Astros comenzaron su estadía en casa con buen pie, con triunfo 3-1 sobre Pittsburgh.
En saldo azul
Muchas veces me he negado a indicar que una buena racha por la cual estén sufriendo los Astros es el "punto de viraje" que significa, por fin, el momento que voltea la tortilla y cambia la hasta ahora mala suerte del equipo sideral. Pero no podemos pasar por alto que Houston ha tenido, por fin (primera ocasión desde junio 13 pasado), un tour fuera del Parque Minute Maid con saldo positivo, de 4 victorias por 2 reveses.
Y los triunfos obtenidos, al menos en la serie contra los Diamondbacks de Arizona, fueron a palo limpio, en contraste a la escasa potencia ofensiva que los ha plagado durante toda la campaña.
Fueron en total 8 vuelacercas los conectados en el Chase Field en estos tres encuentros por los Astros, un giro de 180 grados. ¿Era sólo asunto que el equipo estuviera completamente saludable?
Por lo menos Morgan Ensberg ha mostrado síntomas de regresar a la forma que lo caracterizó el año pasado (que no siga disimulando sus dolencias, por favor). Desde su regreso el 1 de este mes, lleva promedio de .292, con cinco carreras anotadas, cuatro boletos y una impulsada.
Luke Scott igualmente ha marcado la pauta, y lo que ha hecho en los últimos días ha sido monstruoso. Sin contar la derrota del domingo 4-3 ante los Cascabeles, tenía average de .397, producto de 23 imparables en 58 turnos, con par de bambinazos y nueve remolcadas desde su regreso el 13 de julio. Mike Lamb, quien igualmente la botó hoy, a pesar que ha visto su tiempo de juego sensiblemente disminuido por la llegada de Scott y Ensberg, además de la adición de Aubrey Huff, aún mantiene promedio de .320. (No nos olvidamos del soberbio grand slam de Brad Ausmus).
Mención aparte merece Willy Taveras, destacado con su bate contra Arizona, y ese es otro cambio muy bienvenido: en estos tres partidos, tuvo promedio de .571, con 8 hits en 14 turnos, 2 impulsadas, un tubey y un cuadrangular, que acercó a los siderales en el noveno en el juego de cierre pero que no fue suficiente para voltear el marcador.

¿Ustedes se dieron cuenta de como Fernando Nieve regresó en rol de relevista? Matt Albers fue bajado y Nieve regresó, mostrando una slider contundente y una recta de postín. Entre quienes presenciamos el juego nos dejó simplemente boquiabiertos. Fue un inning en el cual no permitió mayores libertades, y la verdad mostró que no tiene ya nada que hacer en Triple-A.
Tanta ofensiva tapó una actuación no muy satisfactoria el viernes para Roy Oswalt, quien otorgara 12 imparables y 4 carreras en 6 innings, aunque después de los traspiés de Chad Qualls, el bullpen supo amarrar a Arizona, con todo y la (muy usual para nuestro gusto) salida errática de Brad Lidge. El sábado, Roger Clemens hizo lo que mejor sabe hacer: tres carreras y ocho indiscutibles concedidos en siete entradas, y el domingo, Andy Pettitte tuvo sus momentos brillantes (abanicó a seis) pero simplemente no fue suficiente.
No quiero llamarlo "punto de viraje" pero el equipo está saludable y viviendo un buen momento. Ojalá dure mucho.
Dos de tres no es malo
Parece que fue en el siglo pasado la última ocasión en la que los Astros ganaron una serie en la carretera. Dos de tres en el Petco Park contra los Padres de San Diego en los cuales se demostro, cual verdad de Perogrullo, que este equipo cuenta con sólido pitcheo abridor y lo demás, el batazo oportuno, cuesta un poco en venir.
El martes le correspondió a Andy Pettitte tener una salida dominante, de esas que le ha costado un mundo obtener últimamente. Pero así lo hizo en seis sólidos episodios, en los cuales ponchó a 8 y Houston pudo vencer por la mìnima diferencia 1-0. Al día siguiente, fue la primera salida satisfactoria para Brandon Backe desde su regreso de la lista de incapacitados, y lo mejor de todo fue el apoyo ofensivo recibido, coronado por jonrones de Craig Biggio y Mike Lamb, con final de 7-1.
En el último partido de la serie, le correspondió la responsabilidad al novato Matt Albers, quien se mantuvo a la altura de la ocasión, hasta que otorgó una anotación en el cuarto capítulo, y tres más en el quinto, lo cual se debió a un traspies del novel lanzador.
A los Astros le falta mucho terreno por ganar, especialmente en una carrera por el comodín que aún se ve posible. Y esto es precisamente lo que necesita: empezar a ganar las series, y más especialmente las de la carretera.
A discreción
La hora definitiva para hacer canjes en el béisbol de Grandes Ligas ya pasó, y este año las cosas estuvieron muy activas. Greg Maddux ahora viste la camiseta de los Dodgers de Los Angeles, Sean Casey viene a complementar a los ya poderosos Tigres de Detroit, Cesar Izturis ahora cuidará el campocorto del Wrigley Field, Bobby Abreu es un Mulo de Manhattan.
Y Miguel Tejada sigue siendo parte de los Orioles de Baltimore.
Los Astros al final no entraron en el festín de los canjes por segundo año consecutivo, y no fue por falta de intentos. Activamente persiguieron a Tejada, pero el precio quizá haya sido muy alto. Nombres como los de Brad Lidge, Roy Oswalt, Morgan Ensberg fueron barajados, al menos en las especulaciones de los medios (Tim Purpura nunca va a hablar sobre este tipo de cosas).
Se habló de que el estelar Oswalt había sido exigido; y que hasta Billy Wagner iba a darle a los Mets reportes de scouting sobre él. ¿A quién iban a mandar por parte de los Mets? Si es que en realidad los asombrosos alguna vez hicieron esa llamada. No hay nada que nos haga pensar que no.
En todo caso, haber enviado a Oswalt a otro lado (siendo uno de los más consistentes ganadores del equipo) no era lo que se tenía en mente, y si lo que reporta Ken Rosenthal es cierto, pues el precio a pagar iba a ser demasiado alto. No creo que el haber separado a Roy O del equipo hubiese sido la solución, por más preciado y productivo que pudiera ser la pieza a buscar. Es muy probable que nos evitaron 20 años de rencores, al mejor estilo Nolan Ryan.
Si de verdad se trabajó duro en conseguir algo interesante, pues los resultados fueron vanos. Una de dos opciones nos quedan a pensar: o bien los jugadores puestos sobre la mesa fueron subvaluados por sus potenciales compradores, o hubo falta de agresividad a la hora de negociar.
Este en lo particular era un año en el cual la Gerencia estaba obligada, debido a los pobres resultados mostrados en el campo, de hacer una fuerte demostración de que la bandera blanca no había sido izada y que la temporada no es un caso perdido. Pero ningún esfuerzo hubiese valido la salida del brazo más prometedor de la organización.
Sin embargo, después de hoy, va a ser muy dificil convencer a los fanáticos de que aún hay esperanzas. Ojalá y me equivoque.
Sin pausas
No se puede decir que la Gerencia de los Astros de Houston se ha quedado tranquila en los últimos días. Están trabajando con los teléfonos incesantemente. Scouts de los Orioles de Baltimore han estado evaluando peloteros en Houston este último par de días. Pero aún no se puede decir que haya algo definitivo, así que habrá que esperar y ver que ocurre.
Si los Astros se hacen de los servicios de Miguel Tejada esto obviamente mejoraría sustancialmente la ofensiva. Ahora, ¿qué estará pidiendo Baltimore a cambio? Es mucho lo que se especula, y se habla de cualquier pelotero, sea el prospecto Jason Hirsh, o Chris Burke. Quién sabe. Es difícil para Tim Purpura, hombre formado en las filas del desarrollo de peloteros, y quien ve la imagen del equipo a largo plazo, deshacerse de una de sus piezas.
Igualmente, ayer sorprendió un poco la llegada nuevamente de Chris Sampson al equipo grande, mientras que Taylor Buchholz fue enviado a Round Rock junto con Morgan Ensberg, quien irá a rehabilitación. Buchholz, al igual que Wandy Rodríguez, debe mantenerse en un programa como abridor, y es cierto que su promedio de carreras limpias permitidas ha subido constantemente. Sampson dejó una buena impresión en su corta estadía con el equipo grande, lo cual se ve recompensado con este retorno.
Y los Astros tampoco se han quedado quietos dentro del campo. Roy Oswalt lanzó ocho entradas de manera excelente, para que los espaciales se impusieran a los Diamondbacks 4-1. Willy Taveras impulsó par de carreras con un triple y Craig Biggio soltó cuadrangular. Por supuesto que la gran noticia fue la soberbia actuación monticular de Oswalt.
Estos son los días en los cuales los fanáticos hacen sus especulaciones sobre quien se va y quien queda. Lo único que sabemos es que al menos los altos rangos de la organización no dan esta temporada como perdida aún.