Comienza la fiesta…
Llegamos a la Serie del Caribe 2010, en una Isla de Margarita que aún se acostumbra a albergar un evento de semejante magnitud.
A pesar de lo que muchos comentan, y con mucha razón, que la Serie podría estar perdiendo relevancia e interés debido a la ausencia de las grandes estrellas del béisbol latinoamericano, lo cierto es que para el visitante al Estado Nueva Esparta, podría ser considerado como una gran mentira.
Colas, colas y más colas ha sido la constante durante estos días. No ha sido fácil ir a una tienda, para aprovechar el estar en uno de los dos únicos Puertos Libres de impuestos de nacionalización en Venezuela; y mucho menos el llegar al estadio ni siquiera el día de entrega de credenciales.

El ambiente del primer dia es uno de afinar detalles, perfeccionar cosas que aún no están listas, y otras que ya están a pleno: la identificación de las zonas está muy bien definida, las normas para con los medios aún tienen lagunas por solventar. El Internet inalámbrico está más inconsistente que los pitcheos de Mitch Williams en la Serie Mundial de 1993.
Sin embargo, hay ambiente y hay mucho buen humor. Así lo constatamos con el manager Mako Oliveras de Puerto Rico, quien habla de su equipo los Indios de Mayagüez y de los problemas que confronta la Liga de su país, y completa con versos de canciones de Tito Rodríguez. También lo vimos con el astro del equipo Dominicano, el lanzador Nelson Figueroa, quien reía a carcajada sonora cuando le referimos que, por tantos viajes a los distintos países de la Confederación del Caribe, su pasaporte se renovaba antes de su vencimiento por tantos sellos que se estampaban en él.
La Serie del Caribe tiene mucho que mejorar, y eso arranca en mejorar el nivel de los peloteros que participan en ella. Parece mentira que, hace 40 años o más, estrellas como Willie Mays participaron en el que es el torneo de béisbol más antiguo del mundo; si lo comparamos con que, hoy en día, no está presente un Francisco Liriano. Sin embargo, aún interesa, aún llama la atención y mueve público. Ojalá sea así durante toda esta semana.